En el principio existe el mundo. A el viene el hombre y con el la complicación. Amen. Mientras pierdo la batalla en aquel campo que aún aprecio, en uno de esos campos alguna vez pensado muerto – campo que jamás brindaría señal alguna de acción, de vida – los sucesos del ayer y ayeres recientes provocan duda. ”¿Recupera gravedad?” me pregunto. Ya que en la vida, hay campos de guerra … facetas de nuestra vida que traversamos … y con la misma fácilidad con la que inicia un fuego, con ella termina … y dejamos atrás la faceta creyendo que ella no dará vida más a emoción o sentimiento alguno. “No he perdido esta batalla, en este campo no he quedado muerto … simplemente he avanzado … y la tendencia a mirar hacia atrás también muere e ingresa el olvido. A todo esto interpolo lo siguiente:
C: do you like laura’s new album?
I: laura who?
C: pausini
I: i haven’t heard it
C: ay dios
…
C: i thought of you when i heard it
I adriyk: why?
C: i have my reasons 🙂
I: which are … ?
C: not sure i’m ready to divulge them
I: that’s not fair
I: pray tell
C: but one reason is because you introduced me to her
I ah yes
I: and?
C: i dunno…just thinking of how we once were
I: which was?
C: i don’t know if i actually know the exact reason why it makes me think of you
I: hah
Y creer que alguna vez te tuve en mis manos, que alguna vez susurraba tu nombre en mis noches de felicidad y ansiedad. Te quise tener, cerca a mí, probar a ser dos en dos y submerger en unión. Pensar que … “Seguro querrá escucharme decir su nombre.” Pensar que alguna vez fui doble ingenuo.
Y me veo regresando a este campo en pensamiento. Las memorias son tan borrosas que me permito crear una versión nueva. Uno que otro fragmento queda intacto. El resto ha perdido su tinta en las aguas del tiempo, aquellas que atacan sus cuerpecillo mil veces sin cesar. Uno que otro fragmento que se niega a ser extirpado de mi ser, lleva la idea de la felicidad mientras que algunos llevan la idea de la tristeza.
Recuerdo cuando estabamos en el techo de aquel edificio no edificio. Y desde este punto a las seis de la mañana – ya que no podiamos dormir subimos a el – consumí la realidad en su totalidad. Y era de esos tontos que creían que donde existe la idea del amor, se entrega el ser pero eso prefiero dejarlo en el olvido por mi propio bien. Aún escucho el ruido del generador de electricidad de la universidad rompiendo el silencio de la mañana. Aún recuerdo el calor matutino … y recuerdo los brazos que me ofrecían seguridad… amor … esperanza.
Digo esperanza porque el ser mío jamás creyó que sería amado. Soñaba con viajar a marte e ir lejos para no tener que preocupar mi mente con tanto agobio.
Mas aunque recuerdo cosas como la que describo – su potencia ha sido destruída. No me causa emoción alguna (me toco el corazón y palpita en calma, no siento la ansiedad que surge en el cuando … me habla).
El amor es como un fuego – necesita de ciertas cosas para seguir sino muere.
En fin, siento haber regresado a este antiguo campo … y he batallado una vez más pero esta vez con calma, con desconexión total. Me siento como un extraño que le pregunta a otro, “Cuéntame sobre mi vida que ya no la recuerdo. Sé que sólo han pasado tres años pero creerías si te dijiese que ya no recuerdo nada?” Tan fatal fue la derrota que preferí olvidar. Pero no fue tan fatal porque aunque eche todo lo que tenía … mis recursos eran tan escasos que aquella gran guerra (en ese entonces) ahora sería una bofetada entre dos extraños que pasan con la intención del destino de jamás permitirles volver a verse. Crecí y aprendí nuevas tácticas aunque siempre con la tendencia a echar todo – sacrificar todo.
Pero como he dicho … este campo ya no me trae satisfacción ni emoción.
La vida me roba el único campo que actualmente deseo visitar – una guerra más. Y me frustro. ¿Y todo lo que fui? No sé. Sé que con el tiempo a éste no regresaré.
¿Recuerdas a X y cómo le amabas?
No. ¿Quién? Su nombre no me suena conocido
¡Pero jurabas amarle!
¿Sí? Ni idea. Sabes el día hoy es cálido